Primera Mesa de la Mujer Rural inicia en Pozo Almonte con énfasis en la gestión de emergencias.
La localidad de La Tirana, comuna de Pozo Almonte, fue escenario de un importante espacio de conversación para las mujeres rurales de Tarapacá, con la realización de la Primera Mesa Técnica de la Mujer Rural e Indígena, que reunió a autoridades regionales y mujeres agricultoras en el Camping Los Pinos. El encuentro, organizado por INDAP y la Seremi de la Mujer y Equidad de Género, marcó una interesante inquietud de las mujeres del campo y precedente en la articulación de servicios públicos para fortalecer la autonomía económica y la gestión de emergencias en comunidades rurales.
Rodrigo Ackerman Pedrero, Gestor de Operaciones de Emergencia de SENAPRED Tarapacá, destacó la importancia de capacitar a las comunidades aisladas en la gestión del riesgo. «Las mujeres cumplen un rol fundamental no solo en el ámbito agrícola, sino también como cuidadoras. Es vital que estén informadas sobre cómo actuar durante una emergencia», señaló durante su presentación.
La Seremi de la Mujer, Noemí Salinas Polanco, expresó su satisfacción por la participación de mujeres de diversas comunas como Parca y Pintados. «Esto refleja una continuidad en nuestro trabajo desde años previos y nos proyecta hacia 2025», destacó, enfatizando la importancia del despliegue estatal en territorios rurales.
Por su parte, Natalia Currín Aracena, directora de Sernameg Tarapacá, subrayó el valor de acercar la oferta programática a las mujeres rurales: «Este espacio facilita que lleguemos a ellas con los recursos necesarios», afirmó.
Un aspecto destacado, en como los instrumentos públicos de los servicios pueden entregar una ayuda, en sus accesos fue la presentación de Roxana Núñez, Jefa de Operaciones de INDAP Tarapacá, quien reveló que «el 42% de las mujeres usuarias de INDAP en Tarapacá están accediendo a créditos tanto de corto como largo plazo», resaltando la excelente tasa de retorno de estos préstamos y que desde hace un año cuenta con una plataforma digital de pago, para evitar los traslados a los centros urbanos; optimizándose los tiempos de labores en la chacra o quehaceres en la familia o personal.
El impacto de estas iniciativas se refleja en testimonios como el de Marcela López Lázaro, agricultora de La Tirana, quien valoró especialmente el conocimiento adquirido sobre SENAPRED y las capacitaciones de INDAP en técnicas agrícolas y uso eficiente del agua, por ejemplo.
La implementación de esta Mesa representa un avance significativo en la reducción de brechas de género en el sector rural. Sin embargo, el desafío es constante y radica en mantener la continuidad de estos espacios y asegurar que la información y los recursos lleguen efectivamente a las mujeres más aisladas. La articulación entre instituciones públicas y el compromiso de las propias beneficiarias siguen siendo fundamentales, para avanzar en el mejoramiento del acceso al Estado, en la ruralidad.
